9 de marzo de 2022 a las 22:54
#2160
Moderador
Efectivamente, María del Pilar, en el primer caso expuesto por Gisela hemos querido traer a reflexión esta realidad con la que nos encontramos a menudo que es que después de procesos durísimos y deambulaciones por incontables servicios, cuando consiguen la abstinencia, la situación de precariedad que les toca vivir junto con el aislamiento por falta de apoyo familiar y social las lleva a una sensación de desánimo y de fracaso.
Os lanzo una pregunta: ¿qué elementos en los procesos finales de reinserción se os ocurren que deberían mejorar para evitar estas situaciones?