Buenas tardes:
Pues estoy muy de acuerdo en casi todo lo que se ha ido comentando hasta ahora.
El ser drogodependiente es algo que llevan muchos años diciéndoselo a las pacientes, es algo “evidente”. Mientras que el ser maltratada no es tan “publico”, está mas callado, y mas si el maltrato no es físico. Me explico la familia/amigos si que las habrán comentado en alguna ocasión lo que bebe, las consecuencias del consumo, los conflictos en casa…. Pero cuantas veces la familia/amigos han hablado con ellas e incidido en como le trata su pareja, o han preguntado si ha habido otro tipo de maltrato de puertas para dentro en casa???
Creo que eso hace que sea mas “fácil” ser considerada “drogodependiente” que “maltratada”.
Creo que para los profesionales a veces, también nos es mas “fácil” una que otra. Pienso, que aquí debería haber un planteamiento y coordinación en ambos recursos, tanto los de drogodependencias como en los de VG. Para mi, la coordinación, comunicación y comunicación entre los recursos es fundamental